lunes, 26 de noviembre de 2012

"Naranjitas y limones.."



Esta vez “M” se ha ido a Valencia. No es nuevo ni la ausencia ni el lugar.  Se fue como a ella le gusta; centrifugando la lavadora. Aquí nos ha dejado a Colette y a un servidor; en la penumbra de su vida. Relegados a una llamadita de teléfono entre regalo y regalo. Sin pienso, sin sexo y sin stick de hockey. Cómo me gustaría ser pagano para maldecir a decenas de Dioses implicados en esta situación. En fin…hay que reponerse; levantarse y luchar.
Mi pregunta es: -¿Cómo reponerse de un abandono? Buscar en la red una señorita de compañía o en su defecto de una señorita de látex. Estas últimas no te abandonan, en algún caso se comenta que se desinflan pero que jamás ponen una lavadora centrifugando cuando más paz se necesita. Las otras se mueven más y hasta puede que tengan otras virtudes pero con esta maldita crisis cualquiera hace una inversión así….
Mantenerte útil para la comunidad es otra de las opciones. Ir a buscar setas y repartirla entre el vecindario, ayudar a cruzar la calle a borrachos y meterlos en “algún” sitio para que les atraquen,  darle fuego a los necesitados (..) Podría hacerlo pero en vez de encontrar hongos me voy encontrando perros de caza que se pierden y por más que busco los hongos no aparecen por ningún lado.  Está lloviendo bastante así que tampoco me encuentro con ganas de esperar a nadie abajo para ayudar.
Dedicarme a mí es algo importante. Crecer como persona, instruirme y disciplinarme para ser mejor. Pero no me apetece la verdad. Me gustaría meterme en la red y destruir el sistema, mover misiles en Rusia, hacer que se caiga el sistema de las tarjetas de crédito, meterme en el bingo de turno y que canten bingo siempre los mismos… pero para eso hay que saber y yo solo he visto las películas adecuadas.
Realmente no quiero hacer nada para superar esta situación. Me derrumbaré en el sofá rodeado de latas de cerveza y veré en la tv un programa dónde salgan señores y señoras hablando de como se ha separado un torero y que la princesa del pueblo grite a todos los presentes. O puede que haga lo mismo y cambie programa por partido de tenis para sentirme todavía peor recordando que no tengo cuerdas..Lo importante es el matiz de las cervezas, beber hasta caer redondo. 2 cervezas y media, perder la conciencia del ser, del Ente y del espacio.
Aunque lo mejor sería la opción de la rebeldía. Rebelión ante la ley, ante el poder establecido. Bienvenidos a los nuevos diarios de rebeldía. Día 1: dejar la ropa en la lavadora para que la humedad se impregne hasta la última fibra de las sábanas y del edredón. Que el moho cubra todo. Día 2: Fumar en todos los lados. Fumar un pitillo dentro del armario de “M”, fumarme otro tapado hasta la cabeza en la cama. Día 3: Cerrar la casa a cal y canto, recoger todo y pirarme al lugar más recóndito del mundo para conservar la integridad física.
Quizás lo mejor sea aprovechar el momento y disfrutar de 2 días y medio sin ducharme, porno en la red, cocinar sin campana y mantener todo limpito o sin usar para que el mañana sea un nuevo día y no el final del calendario maya.
Lo mejor será que me empape de nuevo en el Bushido. Que acepte mi entorno, que me abra a las venas de la vida, al conocimiento. Convertirme en un pino verde, solitario en un valle en un invierno frío. Magnánimo como una montaña; que mi corazón acepte todo bajo el cielo. Macaguen el puto zen…


Llamaré a Jon para tomar algo…es un tío guay.. 

sábado, 13 de octubre de 2012

"the winter is coming"



Querido diario de ausencias:
Hace tanto tiempo que no he escrito que casi se me había olvidado tu existencia. No me preguntes el porqué pero “M” se ha vuelto a ir. Y además ha vuelto a Valencia. Su primera acción en la capital del Turia fue mandarme una foto en la playa la muy….detestable. Estuve tentado de mandarle una foto de Colette en la lavadora pero la muy cabrona no se estaba quieta…..
Mi jefa de camada se ha ido. No está en casa cuando llego de olisquear meadas y revolcarme en la mierda. Como soy una perrita no me acuerdo siempre de ella. Yo me preocupo de correr muy rápido por el campo, de buscar todos los gatos de los miles que hay aquí, de atrapar moscas y de cruzarme cuando va a pasar un coche. Pero al llegar a casa si me acuerdo. Nadie me raya el queso encima del pienso o me lo condimenta con un volcado. El “otro” me saca de casa continuamente, bebo agua dónde quiero y no estoy aguantando el pis medio día pero no me muerde las orejas ni me abraza.
Yo como soy francesa y un poco guarra prefiero que me den un poco de libertad para ir a ladrar al pastor alemán ese tan majo pero no me quejo. Al menos no huelo continuamente a suavizante ni otros mejunjes de esos que vienen en botellas de colores y los rocía por toda la casa “la otra”. Aunque el reconozco que el toque femenino de la casa no está y entre perritas se extraña. Mientras vuelve seguiré acicalándome, depilándome y haciéndome collares de moscas y comiéndome la cabeza de los muñequitos para mi pastor alemán.
Mosca?!
La ausencia me la he tomado como un paréntesis en mis quehaceres diarios y decidido perderme  durante todo el puente. Ayer me perdí en Orós y hoy lo he vuelto hacer varias veces en Orós (alto y bajo). Eso sí, creo que tengo un callejero bastante aproximado de ambos y todos acaban en caminos que requieren machetes como en la selva.
Me preocupa “el otro”. Parece que cuando va en bici busca moscas. Va por un camino, retrocede, coge otro, empuja la bici entre zarzas (y charcos calentitos con un agua tibia buenísima que además tienes un barro que me vuelve loca…) y juramentos para salir como si hubiese abrazado un gato a otro camino (…). Siempre acabamos en el mismo pueblo. Un pueblo que es un sueño para mí; rebaños de vacas para ladrar, ovejas preciosas para mordisquear, un olor embriagador que me emborracha y unos perros monísimos que me ladran como tontos…
Luego en casa mientras me relamo y dormito, lo veo sentado en el ordenador farfullando algo de películas o no sé qué…Incluso madruga para limpiar la casa…me preocupa mucho. Espero que “la otra” venga pronto porque empiezo a tener hambre tanto ejercicio y no quiero pienso a palo seco. Quizá un pienso con un volcado de setas y gambas…mon dieu!!! Morderé un poco las sábanas.
“M” se fue hace 2 días. La vigilia se prolonga ya mucho tiempo. No sé si estoy dormido o soñando; todo parece la copia de la copia…He dejado las patatas y la cerveza en la cama, he olvidado si Barney se casaba con Robin y parece que fue hace siglos la última vez que oí el ruido de la lavadora.
Quiero que vuelva la normalidad (y la detestable) para sacar adelante juntos a Colette. Quiero que crezca en una familia unida y educarla con una madre. Quiero jugar a tenis y que el asunto de los cordajes sea un mal sueño. No quiero entrar en una conversación diciendo “-Hola. Me llamo Ricardo y llevo 4 días sin jugar a tenis.” Tengo mucho vicio y la terapia de grupo no me vale para nada. Quiero ver de quien es la boda en la 8ª temporada y quiero…quiero…quiero un stick de hockey.

Ardilla?!

sábado, 19 de mayo de 2012

"Valores"


De nuevo escribiendo en un piso silencioso y oscuro que ha dejado de oler a productos químicos (lejías, suavizantes, ambientadores..). La ausencia de “M” se deja notar en todos los sentidos. Primero empieza a oler raro, luego aparecen manchas que se extienden conforme pasa el tiempo y el silencio se adueña de todos los espacios de la casa.  La casa comienza a ralentizarse y sus constantes se minimizan.
Ahora estoy en el principio del protocolo. Todavía la cocina y el baño huelen a ese frescor químico que se comenzó a popularizar en las trincheras de la Gran guerra. Es mucho más suave y resulta agradable aunque no se puede olvidar que es el nieto del gas mostaza. Por eso debería abrir la ventana y aprovechar todo el tiempo que pueda para alejarme de ese veneno.
Pero no quiero hablar de esto ahora porque además me suena que ya lo he contado. Mis preocupaciones en este momento son otras muy diferentes. “M” se ha ido a Valencia. “M” es una persona que es en detestable lo mismo que el profesor Moriarty en maldad lo sé. Pero a mi me gusta así; detestable y pelirroja californiana. También es alguien a quien llevo inculcando en el subconsciente muchos años los más rancios valores montañeses; aislamiento e inmovilismo, el culto a lo ancestral, a lo viejo. Cuando ella duerme, le susurro al oído a modo de mantra información que la capta sin ser consciente. Esta se queda allí, encerrada en un oscuro y recóndito trozo de su cerebro, almacenada pero activa. “Más vale dolmen conocido que museo por ver” es una recurrente. “Dios, Patria y rey” la utilizo bastante. “Teme a lo desconocido y a lo nuevo” me gusta mucho. En fin, cosas de esas….  
Y ahora esta en Valencia. Mi detestable dama en una ciudad a orillas de un mar que solo nos trajo desgracias a los montañeses de estos lares. Allí donde hace siglos los hijos de estos valles embarcaron para no volver en pos de Neopatrias Sicilias y parajes ajenos a nosotros. Una ciudad llena de nefastas influencias como el sol, el mar y la diversidad de la gente. Gente de todos los credos, religiones y algunas que serán polígamas y todo.
Si, tengo miedo. Tengo miedo de las influencias de su entorno más cercano allí. Y es que su misma sangre, con quien comparte una buena parte de su información genética se halla rodeada de intelectuales de esos con gafas que leen libros y seguro van al teatro, que critican a al futbol y hasta a la iglesia si te descuidas. Influencias nocivas que hablan en lenguas diferentes que acaban en “i” y en “t” y no van de propio o de cojón. Tengo miedo pero me he pasado muchas noches en vela susurrando….

"La ausencia de todos menos del hortelano"


La ausencia de hoy es total. Salvo Colette todos se han ido dejándome en la soledad absoluta. Huérfano, viudo, solo y mojado porque también llueve. Mi bici desmontada esperando la mano que la saque de su letargo, mi viejo portátil hundido en un coma que temo terminal y la nevera como un reflejo de mi alma.
Se fue de nuevo la doctora detestable sin acabar lo que tenia que hacer. Se fue sonriendo como si de una broma se tratase. Dejo tras de si una lista “De cosas para no hacer” que se podría resumir en no ensuciar, no contaminar y cuidar de la virtud de Colette. Todo muy sencillo de cumplir. Viviré en el descansillo de la escalera y sacaré un corcho de champán de algún sitio.
Mi madre me ha abandonado junto a mi hermana y ella ha dejado una nota con que poder comer y otra lista de tareas que he de sumar a la de mi hermano de riegos, puertas y de la seguridad del resto de familia y la virtud de todos ellos.
A todo esto he de sumar las negras nubes que pueblan el cielo, la sociedad y mi cabeza. Tormentas de gran carga eléctrica que espero no descarguen cerca de mí. Aun así estoy contento porque la lluvia me evita cientos de riegos que hacer. La vida del campo, la cual pensaba era dura pero plácida me estresa. Wall Street es más relajado seguro. Que si las primas de riego bajan y los bonos de siembra suben, que si el sol amenaza una opa hostil y que el vecindario trata de nacionalizar los surcos regados con el sudor de mi frente (y de la de Bastian), que se pierden 5 puntos de pimientos …..Horrible. Suena el despertador temprano cuando esperaba que fuese el gallo quien me sacase de mi sueño y corriendo has de ir de un lado a otro para labrar, reuniones de urgencia por tal o cual riesgo y buscar una cobertura a la planta. Acude a los mercados y peléate con varios brokers de 70 años por el turno, la calidad, la oferta y la demanda.
En mi ignorancia pensaba que me sentaría al lado de mi huerto y fumaria en pipa mientras con Colette tumbada a mi vera observaba como todo crecía exuberante y perfecto. No sabia que tendría que vigilar todos los bichos terrenales (no creo que Noé metiese en el arca una pareja de babosas, otra de cucos rojos..será cosa del diablo) para que no se coman mi huerto mientras observo el cielo y espero que llueva para que las plantas crezcan a la vez que las malas hierbas que tendré que quitar mientras grito a Collie para que no pise mientras corre tras un gato que a su vez quería escarbar mi plantación justo cuando me hablan vecinos y  transeúntes poniendo en tela de juicio las directrices que me han marcado mis maestros (…)
Mientras escribo esto “M” estará en Valencia, mi madre y hermana en Zrgza y el resto en Sitges. Tan mal me he portado para recibir este karma?. Tan equivocado estoy en mi aislamiento?
¿Hay alguien allí? ¿Alguien me escucha?