lunes, 22 de diciembre de 2014

El ciclo de la ausencia



Operación retorno activada a las 8.00 am de hoy. “M” volverá en el día de hoy. Hasta recogerla he de cumplir con un largo protocolo programado. Pero el destino también quiere que hoy sea el primer día de la temporada de ski. Así que he de moverme rápido cuando acabe de comer.
Me levanto de un salto para parar la jodida alarma que después de tanto tiempo sin oírla es horrible. Todavía con el susto en el cuerpo de no saber qué pasaba, si era una alarma de bombardeo, un tren o un asesino en mi cuarto, recuerdo que es día de ski! Café, ropa, plátano y buscar las jodidas gafas que no sé donde las dejé. Corro a buscar a Campo pero desando lo corrido porque me he dejado las botas en el radiador. Recogida, Escarrilla que es punto de encuentro con Abú, trasbordo y Formigal.
Lass botas nos torturan, la falta de nieve nos abruma y los muertos esquiantes nos asustan. Arriba, abajo, cruza valles, retorna, sube, vuelve, insulta al tonto de turno, nieve, capazos, encuentro con Julio, bodeguita, silla y pa casa. Adjunto foto;
Bajo a Biescas, pido un jabalí con patatas y un pan de 2 kg a mi madre para comer. Café a la carrera, me entra ansiedad, me entero que hoy era el sorteo pero que no ha tocado nada a nadie. Colette se vuelve loca en un campo y amanece con zapatillas de barro. La limpio, descargo, cuelgo y subo. Parte 1 finalizada.
Comienza la parte 2. Recojo lo tendido, lo pliego y lo distribuyo. Limpio y almaceno los montones de gabinete. Pliego la ropa de la habitación de “M” y el uniforme para volver a meterlo en el armario. Abro todas las ventanas de la casa. Recojo todas las habitaciones. Hace frío. Subo sillas sobre mesas, doy la comida a Colette. Busco algo mientras sigo subiendo cosas. Adjunto foto:
Me tomo un respiro para organizarme mientras fumo por todas las habitaciones con deleite tengo que decir. Me pongo los cascos, saco el aspirador y aspiro aspiro y aspiro hasta que toda pelusa, zurraspa, piedra, fiemo y elemento extraño desaparece. Friego la casa y me quedo aquí esperando a que se seque todo. En esta isla me acuerdo de que me he olvidado la fregadera…
Comienza la parte 3. Asearme, peinarme, fregadera, baño e ir a buscar a mi femelina mujer tanto tiempo fuera. También tendré que merendar. Joder todo esto significa que tendré que volver a ensuciar….
Este es el ciclo de la mierda.



sábado, 20 de diciembre de 2014

Oda a la alfombra



Cómo algo tan sencillo común y cotidiano ha cambiado mi vida? No lo sé. Cómo he vivido este tiempo en la ignomiosa tiranía del frío suelo? No lo sé. Bendigo los ácaros que me rodean y el microsistema creado en mi salón. Cómo gozaría de un microscopio para espiar tan glorioso ecosistema mullido y acogedor! Mi alfombra es mi reino. Desde aquí la soledad es más caliente y más confortable.  Escribo en la ausencia pero reconfortado con el recuerdo del fuego que un día encendí a escasos centímetros de esta mancha que yo – poder creador- de la nada dibujé.
Maldigo mi ansiedad en la soledad pero el cansancio del día me funde a esta alfombra mágica que vuela y me trasporta al recuerdo del deseo y la lujuria oriental. Tumbado, arropado en mantas, con la tv atronando en diálogos inútiles escribo mientras vuelo en mi alfombra. Vuelo hasta el inconsciente del sueño muy lentamente. Vuelo y atravieso valles oscuros, claros ríos y altas cumbres de lamentable desnudez ávidas de manto blanco.
Vuelo, aterrizo y vuelvo a remontar en mi alfombra de acogedoras fibras nórdicas. Crudo color vergel de lo microscópico, mi alfombra mola. Mola como el frío polvo en una pala larga y tendida. Mola como la lencería en una nave espacial oscura y distante.
Me gusta tanto mi alfombra que la bauticé como Cyrano llamaba a su amada; Roxanna. Y juro que no hay nada deshonroso entre Roxanna y yo. Es una relación delicada, nada de platónica pues solo me importa su roce y abrazo, pero casta hasta la fecha. Aunque la ausencia es larga y la nada descorazonadora, permaneceré impoluto para mi femelina “M” .  Impoluto yo, Roxanna me temo que no. Ayer descubrí un macarrón oculto entre su frondosidad. Me sentí celoso he de reconocer; cubierto totalmente por Roxanna, caliente aún su grasa….Roxanna es sucia, atrevida, capaz de albergar todo…Roxanna. Roxanna. Luz de mi vida, fuego de mis entrañas (…)
Si escribieron a la cebolla cómo no voy a escribir a Roxanna en la ausencia. Pero esto me lo llevaré en un murmullo hasta la luna.  

El gato de Allan Poe



Al filo de la lúgubre medianoche, cabeceando medio dormido, un sonido me alerta. Un visitante a tan intempestivas horas pensé. Abrí la puerta pero solo encontré la nada. Extrañado seguí leyendo el libro de Allan Poe hasta que de nuevo el ruido me sobresaltó. Es el viento y nada más pensé con mi alma rota.
De un golpe abrí la puerta y con un ronroneo un majestuoso gato entró. Sin asomos de reverencia y con aires de gran dama, se sentó en el busto de Palas encima del dintel de la chimenea. Posado inmóvil y nada más.
Esta felina de ébano cambio mis tristes pensamientos. Aun con tu cercenados bigotes y mochos, no serás una cobarde hórrida gata, vetusta y amenazadora. Evadida de la ribera nocturna ¡Dime cuando vendrás de  la ribera plutónica! Y la gata dijo: “Nunca más”
Me asombró que gato tan desgarbado pudiera hablar. No dijo nada más ni siquiera los gigotes movió. “Otros se han ido ya. Mañana él también me dejará.” Nunca más- maulló el felino recién llegado. Más este último “nunca más” una sonrisa irónica atisbé en el plutónico minino.
Sobrecogido al romper el silencio tan idóneas palabras –pensé-, sin duda lo que dice es todo lo que sabe maullar, aprendido de un amo infortunado q quien desastre impío persiguió o abandonó, acosó su soledad sin dar tregua hasta que su centinela solo tuvo un sentido, hasta que su esperanza solo albergó esa carga melancólica de “Nunca más”.
Maldigo mis lecturas románticas en la penumbra de mi mazmorra que torna mi lenguaje en prosa florida y ensalza la soledad y desventura de la ausencia. Maldigo a la colonia de oscuros gatos que al amparo de sociedades pro-lo qué sea proliferan alrededor de mi maullando falacias y promesas femelinas. Maldigo a mi guardián que permite mancillen mi salón con sus contoneos felinos los jodidos mininos. Y por eso grito al viento y al vacio de la nada que me envuelve: “Nunca más”
Chis pum.

No por mucho trasnochar maulla más temprano



Nunca te fíes de un gato. Da igual que tenga bonitos ojos y engatusadora la mirada. No creas que su pelaje, por precioso y suave lo hará más faldero. No pienses que sus contoneos felinos cuando le pones la comida evitaran que se vaya. Un buen día cuando te levantes, no encontrarás al minino. Estará en un tejado lejos del tuyo quizá maullando a la luna quizá maullando al sol. Pensarás en sus bigotes y en sus zarpas que no pueden cazar, pero lejos, allí en los tejados solo tiene que maullar. Pensarás que cuando caiga la noche y el frio se adueñe de los callejones y de los tejados volverá ronroneando a tu chimenea a calentarse.
Pues no. Nada de esto. Llevo encendiendo el fuego y dejando el balcón abierto 3 días y todavía no ha aparecido. Compraré una lubina y la haré al horno. La dejaré en el balcón pensé. Pues ….tampoco. Preguntaré a la Dama de los gatos, me dije. No había visto al minino. Estoy de nuevo en la ausencia. No me lo puedo creer.
Me acabo de levantar para desayunar en un ambiente gélido. No he oído ni miau, ni nada esta cambiado de lugar, ni me falta nada ni sé que hacer. La nada se ha adueñado del pueblo como el año pasado ya ocurrió. Nada que hacer, nada que ver, nada de nada….
El cielo es gris y llueve por las mañanas. Las noches son frías y el fuego ya no se enciende, por lo que me acurruco bajo las mantas esperando a un sueño que nunca llega. La gente que en otros tiempos no dejaba de llamar se ha diluido en la nada que sume todo.

viernes, 28 de noviembre de 2014

Galaxia Fermentos



Soy el comandante de la nave espacial “Nostromo”. Matrícula DVV6444 e itv sideral pasada.  Hace 7 días que fui abandonado a mi suerte en lo más recóndito de alguna galaxia de nombre mítico. (Momento que lo busco aquí en el manual….a ver….si …estoy en Fermentos.  Fermentos que era el mozo de cuadra de Cassandra, la piba esta de Troya que sus oráculos nadie creía. Ya hemos acabado  con todos los mitos de toda cultura antigua y sus personajes principales, secundarios y hasta terciarios para la nomenclatura de las galaxias. Si para bautizar mi localización han  utilizando ya casi atrezzo mitológico imaginad donde estoy; significa que estoy a tomar  por culo). Lo peor es que estamos a jueves sideral y hasta el domingo seguiré en esta ignomiosa soledad llena de carencias.
Sigue lloviendo día tras día. El clima en el espacio sideral está loco. Y es que nos cargamos todo a base de contaminar y tanta nave y satélite..en fin; el progreso. Pero con este tiempo pues las carencias se notan más. Todo el día en la nave que no puedes salir…pues echas de menos ese cariño, compartir la merienda hidrolizada, la gravedad 0 en pareja, a veces eso que confluye todo a favor y acabas dándote un palo…pues esas cosas. No hablas con nadie que no sea el ordenador central, pero es muy maquinal y si la conversación no es técnica pues la verdad, mejor hablas con Alien que no contesta pero mueve el rabo.
El protocolo de ausencia va funcionando y poco a poco me voy rehaciendo. Ya no soy ese comandante abrumado por todo y temeroso continuamente. El ejercicio físico, las tareas rutinarias, unos horarios inflexibles, sexo en internet y “Sideria” la btt (bike top terrain) me han templado ánimos y nervios.
Mi detestable comandante entabla contactos esporádicos interesándose por nave, “Alien” y un poco por mis huesos al final de la sidero-llamada. Todavía no ha accedido a hacer la comunicación desnuda pero no pierdo la esperanza. El espacio sideral es un lugar muy frío, ajeno al ser humano y a sus necesidades. Cualquiera aquejado de mis dolencias sabrá de lo que hablo. Los recuerdos y esos estímulos perniciosos me atacan en cada recodo de la nave. Ropa interior colgada de cerraduras biónicas, botas “Hunter” de dominación británica encima de la cama, zapatos de tacón bajo las baterías atómicas de reminiscencias fetichistas, perfumes embriagadores  pegados a sus trajes anti-gravedad, latas verdes en la nevera (….).Se requiere de una gran fortaleza para superar todos los escollos que afronto en esta ardua tarea que se me ha encomendado.
MI  viaje sideral sigue inexorable hacia el centro de la galaxia. Mi última posición son las coordenadas n-34566/rp 7879’4444 Fermentos 8789’4’’’’444. La oscuridad lo envuelve todo pero al final del trayecto atisbo algo de luz. Una luz brillante y rojiza con un detestable je ne sais qua….